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Ministros do Brasil e Paraguai em encontro unificam o discurso das relações bilaterais


Ministro Rubén Ramírez: Excelentísimo señor ministro y amigo, Don Celso Amorim: Constituye para mi motivo de especial satisfacción y honra recibirlo en esta ocasión como Canciller Nacional, y tener la oportunidad de abordar com Vuestra Excelencia los relevantes temas de la dinámica y provechosa relación que paraguayos y brasileños supimos construir para beneficio de nuestras naciones.

Soy un convencido, Señor ministro, de que estos encuentros de alto nivel agilizan y profundizan las relaciones internacionales, por lo que no podemos sino congratularnos por este acontecimiento, que indudablemente testimonia el excelente nivel de nuestras relaciones bilaterales.

El Paraguay y el Brasil han tenido la grata posibilidad en todos estos años, de desarrollar una positiva experiencia de fructífero interrelacionamiento, que hoy facilita la búsqueda de un mejor aprovechamiento de aquellas oportunidades de beneficios mutuos, así como la comprensión y el necesario ajuste de políticas o acciones que pudieran dificultar nuestro avance en esse sentido.

La profundización de nuestros lazos de amistad y cooperación, así como los niveles de diálogo, coordinación, e intercambio comercial que hemos alcanzado, descubren un promisorio abanico de desafíos y oportunidades para ambas partes, por lo que vuestra presente visita, apreciado Ministro, há constituido una invalorable oportunidad para efectuar, en primer lugar, un repaso de los principales temas que nutren nuestra rica agenda bilateral, a fin de evaluar su marcha, y en su caso, identificar acciones que signifiquen su nuevo impulso o rectificación, y asimismo, intercambiar los pareceres de nuestros gobiernos, acerca de importantes aspectos regionales e internacionales, de interés mutuo.

El Brasil y el Paraguay no solamente son países fronterizos, sino verdaderos socios para el desarrollo. Emprendimientos como los del Mercosur, Itaipú, el Puente de la Amistad y el proyectado 2° Puente, son una muestra de ello, entrelazado nuestros destinos y proponiéndonos nuevos desafíos, para su mejor gestión y aprovechamiento.

En este sentido, celebramos la voluntad de llevar adelante las negociaciones en curso, en relación a la Binacional Itaipú, emprendimiento emblemático y de vital importancia para el desarrollo económico y social de nuestros pueblos. Es el deseo de la República del Paraguay, de llegar a una solución justa y adecuada a los planteamientos presentados.

También, en este contexto, nos place que hayamos reafirmado la determinación de continuar promoviendo la consolidación y el perfeccionamiento de nuestro proceso de integración regional, Mercosur, de forma a expandir los beneficios para todos sus miembros, con especial atención a las necesidades de las economías menores del bloque. A este respecto, el Paraguay considera de suma importancia que todos los países miembros del bloque, ratifiquen prontamente el Fondo para la Convergencia Estructural del Mercosur (FOCEM), a fin de que ese innovador mecanismo de desarrollo, pueda entrar a la brevedad en funcionamiento.

Señor Ministro - Un producto tangible de nuestra buena vecindad constituye sin dudas, la integración fronteriza de nuestras ciudades, y esta realidad, reclama de nuestros gobiernos soluciones de comprensión y creatividad a las problemáticas de su dinámico y creciente interrelacionamiento.

Deseo manifestar mi especial satisfacción por los avances hasta ahora alcanzados en la implementación del Plan de Contingencia del 1° de abril de 2005, que me cupiera acordar en ese entonces en mi carácter de Viceministro de Relaciones Económicas e Integración. Para mi país, es de suma importancia la reafirmación del compromiso de implementar a la brevedad posible, lo acordado por el Grupo de Trabajo Bilateral para el establecimiento de un régimen especial de comercio en dicha zona fronteriza, que tome em consideración la situación de la región, particularmente en materia comercial y social, así como la cooperación comprometida por el Brasil para facilitar las obras de reforma de la cabecera paraguaya del Puente de la Amistad, lo cual contribuirá significativamente, a la agilización del tránsito en dicho paso fronterizo.

Nos congratula, asimismo, que el gobierno del Brasil se asocie al interés paraguayo de impulsar medidas concretas que promuevan el desarrollo industrial y turístico en dicha zona fronteriza. Tengo la certeza de que la firma del Acuerdo para la Construcción del Segundo Puente Internacional sobre el Río Paraná en diciembre del 2005, cuya financiación estará a cargo del Brasil, será parte relevante y beneficiará este proceso.

El fenómeno de la búsqueda de articulación de nuestras ciudades de fronteras, demuestra que nuestro relacionamiento se multiplica em diferentes esferas, no solo geográficas, sino asimismo, de estructuras de poder regional.

En materia económica y comercial aspiramos a una mayor apertura del mercado brasileño a la producción paraguaya, que coadyuve a equilibrar el intercambio comercial entre nuestros países. En tal sentido, el establecimiento de la Comisión de Monitoreo del Comercio entre Paraguay y Brasil, creada en octubre de 2005, ha constituido un instrumento eficaz para articular soluciones a los inconvenientes que impiden el incremento y la fluidez del comercio bilateral, como lo demuestra el avance en cuestiones tales como la autorización para la exportación de carne con hueso paraguaya al Brasil, el restablecimiento en la provisión de materia prima a Trafopar, la suscripción del Acuerdo bilateral para el tránsito carretero de mercaderías por el Puerto de Río Grande, el restablecimiento de embarques de soja transgénica por el Puerto de Paranagua, el mantenimiento de la sucursal del Banco do Brasil en Ciudad del Este, y la suscripción del Memorando de Entendimiento MAG-Embrapa, entre otros temas.

En ese horizonte, debo destacar el hecho de que hayamos consensuado la necesidad de estimular la radicación de mayores inversiones productivas de empresas brasileñas en el Paraguay, y la formación de cadenas productivas entre ambos países, en la perspectiva de corregir las asimetrías de nuestro intercambio comercial.

Señor Ministro - Permítame manifestarle igualmente, mi complacencia por la firma de los Ajustes Complementarios al Acuerdo de Cooperación Básica entre Paraguay y Brasil para la implementación de Proyectos de Cooperación, que comprenden, la modelación de la Política Postal en el Paraguay con el establecimiento del Servicio Postal Universal; la Capacitación de Técnicos y Gestores Públicos en Desarrollo de Instrumentos de Políticas Públicas para la Agricultura Familiar/Campesina; el Desarrollo de Técnicas para la Producción de materias primas de Biocombustible en Paraguay; y la Capacitación Técnica de Investigadores en las principales Cadenas Productivas del Agro negocio em Paraguay; entre otras.

En este esquema de cooperación bilateral, hemos de resaltar asimismo, como ejemplos exitosos de colaboración, los excelentes resultados obtenidos en el Centro de Formación y Capacitación Profesional en Hernandarias, programa desarrollado conjuntamente entre el Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP) y la Agencia Brasileña de Cooperación (ABC). Tal fue el éxito de esta experiencia que manifestamos nuestro interés en extender uma cooperación similar a otro centro, al momento de festejar el Acuerdo tercera etapa, en el área de capacitación en el Centro de formación laboral, em Hernandarias.

Como un fenómeno nuevo de la globalización, el crimen organizado también se ha transnacionalizado y se ha vuelto una amenaza real para todos los estados y sus propias sociedades, por lo que resulta de especial relevancia el Memorandum de Entendimiento bilateral para la Cooperación en Materia de Combate al Tráfico Ilícito de Armas de Fuego, Municiones, Accesorios Explosivos y Otros Materiales Relacionados, que acabamos de firmar.

A ello debemos sumar, nuestra decisión de continuar fortaleciendo la cooperación bilateral en el área (judicial) penal, de manera a contribuir a una mejor comprensión de la legislación y de los procesos judiciales de ambos países, especialmente en el ámbito de la persecución penal y los hechos punibles de carácter transnacional. Hemos reafirmado la importancia de avanzar en el diálogo bilateral sobre cuestiones relacionadas a la concesión del refugio, y en este sentido, el Paraguay ya ha presentado a la Cancillería brasileña, una propuesta de "Acuerdo sobre Tratamiento a Procesados o Condenados por el Crimen de Secuestro de Personas".

Apreciado colega - El Paraguay aprecia en su justa medida el importante gesto de Vuestra visita. Permítame manifestarle asimismo, mis expresiones de gratitud por cuanto hemos tenido la oportunidad de mantener un provechoso diálogo, y realizar un apretado balance de nuestra agenda bilateral. Muchos son los logros alcanzados en estos últimos años. Ellos están marcados por el gran dinamismo que caracteriza a las relaciones entre nuestros países, en donde la fraternidad, la confianza, la solidaridad y el respeto mutuo, constituyen el marco de referencia de nuestra interacción bilateral. Pertenecemos a uma geografía y somos socios en un destino común, regional y geopolítico. Hago votos para que estos principios continúen estableciendo el norte que guíe nuestras acciones en los años venideros, a fin del mayor beneficio y bienestar de nuestros pueblos, brasilero y paraguayo.| Muchas gracias.

Ministro Celso Amorim: Meu querido amigo Rubén Ramirez,Senhores Embaixadores, Senhoras e senhores da imprensa, Gostaria, primeiramente, de agradecer a hospitalidade dos membros do Governo paraguaio pelas oportunidades que nos ofereceram para contatos de trabalho. Creio ser útil que todos saibam da extensão desses contatos. Tivemos ontem um jantar de trabalho com cinco Ministros paraguaios e outras autoridades. Hoje, depois de uma longa conversa entre nós dois, os Chanceleres, tive a ocasião de ser recebido pelo Presidente Nicanor Duarte, a quem transmiti as mais calorosas saudações do Presidente Lula e a quem pude, também, como já havia feito antes com outros Ministros, expressar a filosofia que inspira o Presidente Lula em sua relação com o Paraguai – a visão de nossa relação com o Paraguai como uma relação verdadeiramente estratégica e o desejo de fazer com que essa relação siga sendo a melhor possível e que seja mutuamente benéfica.

Tive, também, a ocasião de estar com empresários e escutar diretamente deles algumas das frustrações que são parte importante de nossa agenda. Conhecer as preocupações e os problemas que têm de ser superados. Creio, nesse sentido, ter sido muito importante haver trazido representantes de vários órgãos da administração pública brasileira e também de empresas privadas. Agradecemos aqui a presença da FIESP. Dentro de poucas semanas, haverá também uma Comissão de Comércio na qual muitas das questões aqui tratadas poderão ser aprofundadas.

Creio, meu querido amigo, que você já mencionou vários dos aspectos sobre os quais falamos. Certamente, a curiosidade dos jornalistas vai continuar depois de nossos discursos, porém eu gostaria de dizer uma coisa que sinto de maneira muito forte. Eu sou um diplomata de carreira e talvez por casualidade - por duas vezes Chanceler, e tive uma grande experiência. E em relação à nossa região, vejo os diplomatas como pertencentes a duas gerações distintas. E a geração não tem somente a ver com a idade, mas sim com o momento histórico que cada um de nós viveu. No Brasil, diziam alguns colegas pouco mais novos que eu, e também minha mulher, que nasceu somente dois anos depois de mim, que há uma diferença de geração entre nós, pois eu havia votado para presidente e eles não, no período de ditadura militar. Agora todos nós votamos, mas somos de gerações diferentes.

Em relação à nossa região, existem também duas gerações de diplomatas, de embaixadores e, talvez, de chanceleres: os que foram ativos na diplomacia do Rio da Prata e os que foram ativos na diplomacia do Mercosul. E eu me sinto da geração do Mercosul. Não quero dizer que as duas coisas não coexistam, para esclarecer a nossos jornalistas. Por que há uma diferença? Porque naquela época a relação dos países seria como uma política de poder, seria uma política de buscar como fazer com que o Paraguai viesse mais para o lado do Brasil e menos para o lado da Argentina, ou que o Uruguai viesse mais para o lado do Brasil e menos para o da Argentina, e como o aspecto da rivalidade na relação entre o Brasil e a Argentina muitas vezes prevalecia sobre o aspecto da amizade, embora ele também existisse.

E eu me sinto da geração Mercosul. O que quer dizer isso? Quer dizer que os problemas que temos não devem ser vistos sob a ótica da rivalidade, da divergência (claro, há que se respeitar os interesses nacionais), mas sob a ótica da integração, sob a ótica de uma associação crescente. Creio que muitas vezes tive a oportunidade de dizer isso, mas quero repetir aqui para os jornalistas, sobretudo os jornalistas paraguaios, que devem estar entediados de escutar essas histórias. É muito importante que compreendam que o mundo em que estamos vivendo, e no qual vamos viver, é um mundo de grandes blocos, de grandes blocos econômicos, de grandes blocos comerciais, de grandes blocos políticos. Mesmo um país grande como o Brasil é, talvez, pequeno nesse mundo de blocos em que se têm, de um lado, os Estados Unidos, que é um bloco em si mesmo, a China, que é um bloco em si mesmo, a União Européia, que é um bloco, naturalmente. O Brasil pode ser, no máximo, um país médio, mas a América do Sul tem um peso muito grande, o Mercosul já tem um peso grande. E é claro que, nessas relações, algumas são mais estratégicas que outras.

A relação com o Paraguai é especialmente estratégica. Bastaria citar duas coisas que foram mencionadas durante o almoço e que são muito importantes: Itaipu, nosso projeto comum (vem de outra era, mas está aí), que responde por 25% da eletricidade consumida no Brasil; e os 400 mil brasileiros no Paraguai - a segunda comunidade de brasileiros fora do Brasil. Isso, somente, serviria para demonstrar que a relação entre Brasil e Paraguai tem que ser estratégica. Mas, mais do que isso, sabemos também - muitas vezes digo isso inclusive no Brasil - que o Brasil freqüentemente se viu como um país menor do que realmente é - e em todos os sentidos. Ambicionava pouco no plano global e, por outro lado, não assumia a responsabilidade que tem como o maior país, como a maior economia no plano regional, para com seus sócios, que são economias menores.

Então, é com esse espírito que o presidente Lula pensa a integração, pensa a nossa relação bilateral. E, por isso, para mim foi tão importante escutar não somente o presidente Duarte, os propósitos que temos de integração, de seguir discutindo essa questão, de resolver rapidamente algumas delas (algumas não dependem somente de nós - embora, sim, dependam dos Governos), mas escutar, também, as queixas específicas dos empresários. Porque não é suficiente que os Presidentes, ou os Chanceleres, ou os outros Ministros, estejam impregnados do espírito de integração. É necessário, como dizemos no Brasil, que o "guarda do quarteirão" esteja impregnado do espírito de integração. E isso não quer dizer com respeito às normas, de maneira nenhuma. Queremos normas elevadas, queremos que os consumidores brasileiros e paraguaios sejam protegidos, e por isso temos nossa Agência de Vigilância Sanitária, por isso temos nosso Instituto de Meteorologia e por isso queremos cooperar com o Paraguai com nosso Instituto de Propriedade Intelectual, cujo representante não veio hoje, mas que, creio, vai estar na reunião do dia quatro. Por isso temos essas instituições, e por isso temos que cooperar. Mas também é necessário compreender que... Eu não sou jurista, mas há uma expressão latina, creio que é mais ou menos assim "summum jus, summa injuria": a aplicação excessiva do direito cria injustiça. Levar uma regra ao extremo não é respeitar a lei, é feri-la, violá-la.

Com esse espírito é que vim aqui, com esse espírito tivemos nossas conversas, com esse espírito tive uma recepção não somente cordial, mas diria mesmo carinhosa, por parte do Presidente Duarte, que é um grande amigo do Brasil por quem o Presidente Lula tem grande afeto, e a quem quer apoiar - naturalmente, da maneira como se deve apoiar Chefes de Estado de nações independentes - para ajudar a que o Paraguai realize seus projetos de reforma social, de melhor integração.

Por que se mudou, hoje, a visão para as soluções imediatas, temporárias, para Ciudad del Este? Porque há dos dois lados um trabalho, há um esforço do Paraguai de formalizar esse trabalho. E a esse esforço deve também corresponder um esforço do Brasil para ajudar, para fazer que os produtores legítimos tenham mais facilidade em realizar seus intercâmbios. E há muitas outras coisas, há muitas regras no Mercosul. E creio que seria muito. Talvez cause tédio estar aqui dizendo todas essas coisas, mas, sim, quero dizer que esse é o espírito: a percepção de que as economias menores merecem um tratamento especial. E até agora tiveram um tratamento especial, mas no sentido inverso! O normal seria que o Paraguai e o Uruguai pudessem exportar mais ao Brasil - e à Argentina talvez, mas seguramente ao Brasil. Mas não foi isso que aconteceu. Então, temos que... Certa vez disse no Brasil que temos de ter um "new deal", não uma nova negociação, mas um novo entendimento entre nossos países e com esse objetivo. E fiquei muito contente de ver que, em que pese às reclamações - sobretudo no setor empresarial -, em que pese às expectativas frustradas, há, também, esperança e confiança. Creio que não é necessário dizer que não vim aqui para fazer promessas; vim aqui para ajudar a criar o quadro político para adiantar algumas negociações que já estão avançadas e para empurrar outras. E também para criar o ambiente para que as travas - como dizem vocês - ao comércio possam ser removidas quando se trate, de fato, de travas sem justificativa.

Isso era o que queria dizer. Essa é minha primeira visita como Chanceler, visita de Chanceler, digamos assim, fora de um quadro de reunião multilateral ou na companhia do Presidente. Primeira visita bilateral de chanceler que faço depois da eleição do Presidente Lula. Creio que isso demonstra, em si mesmo... Visita em retribuição à sua visita de três meses atrás - uma retribuição bem rápida, creio eu. Espero que possamos continuar assim e que em pouco tempo você possa também estar no Brasil. Quero dizer, novamente, a nossos amigos do Paraguai, que o Brasil vai fazer sua parte para garantir que o Paraguai possa obter todas as vantagens que esperava, desde o início, obter do Mercosul e de sua relação com o Brasil. Muito obrigado. | . Foto: Ministro Celso Amorim encontra-se com o ministro das Relações Exteriores do Paraguai, Ruben Ramirez, em Assunção, Paraguai | Por: MRE / AIG

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